En la ciudad de los Ángeles, existe una presencia moderada de inmigración italiana. Al comenzar la década de los años 20’ del
siglo XX, se pueden observar, en el ramo de abarrotes a Antonio Samarotto, Alejandro Sarpi y la viuda de
Antonio Beltramini. Es interesante constatar, además, que Luis Tedeschi, mantiene un almacén de abarrotes, mientras en
paralelo ejerce su profesión de veterinario. Es destacable y llama la atención el número de súbditos ítalos situados en el sector
hotelería
. Figuran, por ejemplo, Carlos Bassaletti, José B. Burzio e Italo Martelli. Otra característica,
digna de indicar es la variedad de áreas en que trabajan, es el caso de José Fasano, dueño del Hotel Francia
que, además,
posee una chanchería
. Encontramos, del mismo modo, una fábrica de cecinas, de propiedad de José Yori. En cuanto a locales
y talleres de sombrerería, descubrimos a Eugenio Bernasconi, Saira de Coda y Ángel Morando. Completamos está
enumeración, señalando a aquellos comerciantes dedicados a la actividad de zapaterías
: Alfredo Anziani y Adriano
Crovetto