Esta es una iniciativa concebida al interior de la Sociedad de Socorros Mutuos La Italia.
Alrededor de una docena de socios, en su mayoría fundadores de la sociedad mutualista, se reunen en julio de 1890 para impulsar la
iniciativa de formar una institución educacional para difundir el idioma italiano y preservarlo para las futuras generaciones. Después
de esta reunión preliminar, acuerdan juntarse en la casa del maestro de música Pedro Traversari, concretando el acuerdo de
formar un comité
para la recolección de fondos pro-escuela. Entre los principales animadores está el poeta Roberto Fulle,
el pintor Juan Mochi, el arquitecto Eduardo Provasoli y Antonio Vanini, a la sazón vicepresidente de La Italia. Y
es, justamente, quien presenta ante los consejeros la moción de utilizar los fondos excedentes de las obras sociales para apoyar la
creación de una escuela, provocando una intensa polémica al interior de la organización, demostrando que la colonia tiene escaso
interés en crear un establecimiento educacional. Más aún, en la primera época, la idea provoca un franco rechazo. Sin embargo, algunos
miembros de la comunidad se muestran sorprendidos ante la inexistencia de una escuela en una ciudad tan importante como la capital de
la república. Es el caso, por ejemplo, del propietario y periodista del periódico L‘Eco d' Italia
, Carlos Piva.
Esta realidad lo induce a intervenir a favor de la campaña pro-escuela. Sostiene que el centro educacional debe ser mixto, orientado
por programa de estudios aplicados en Italia y con profesores peninsulares; propone que la Scuola llevase el nombre de los reyes de
Italia
.
Además, desde un comienzo la escuela no concita el consenso de la comunidad, en el sentido de quienes debían ser sus alumnos. Mientras
Fulle, uno de los principales promotores, plantea que debe destinarse a todos los hijos de italianos sin distinción de tipo
socio-económico o de procedencia regional, otros sostienen que su servicio debe estar destinado a los hijos de aquellas familias que se
encuentran en una situación económico desmejorada.
Hacia el tercer lustro del siglo XX, la Scuola funciona como un colegio mixto con alrededor de 450 alumnos que, cursan desde
kindergarten
a 6° de humanidades, y funciona en un local situado en Agustinas esquina de Miraflores.
Origen y desarrollo de la Colonia Italiana en Santiago, 1850-1918