Con un modesto capital de $ 5.000, el año 1918, el señor don Luis Cavalli colocaba los cimientos de la que hoy
es la gran fábrica de cajas de cartón que tiene establecida en la calle de Pío XI Nº 55, teléfono Nº 647, Casilla
postal Nº 3528.
Este establecimiento que hace honor a las Industrias Italianas en esta República está instalado en un hermoso y amplio
local, construido ad-hoc, por el señor Cavalli, con maquinarias de las más modernas con una capacidad muy superior a
los operarios que actualmente trabajan en la misma, que ascienden a 55, los que son dirigidos personalmente por el
señor Cavalli; local que cuenta con aire y luz en abundancia y en fin con todos los requisitos que la moderna
legislación del trabajo recomienda y exige.
Esta importante firma importa directamente todo lo que pueda necesitar del extranjero tal como ser papeles, alambres,
cromos, etc., lo que la pone en condiciones de poder competir con ventaja con las similares del país y al mismo tiempo
de tener stock de materias primas para poder servir pedidos de la mayor importancia.
La verdadera demostración de lo que puede un hombre de la capacidad, voluntad y trabajo, lo dan las cifras del capital
inicial y la del actual el que asciende a la suma de cuatrocientos mil pesos, cifra está que evita todo el comentario
de elogios que podríamos hacer al respecto.
Este establecimiento Fábrica toda clase de cajas de cartón, de todos los tamaños y modelos que se le encomienden desde
las más corrientes a las clases más finas y en cualquiera cantidad, teniendo activo mercado de exportación a la vecina
República de Bolivia.
Tanto la fábrica como el hermoso edificio de dos pisos que habita el señor Cavalli y familia, es de propiedad del mismo
y tiene el mérito de haber sido construido bajo la dirección del señor Cavalli, siendo de admirar la casa habitación
del mismo, la que es una verdadera joya, por haber en ella muebles de un gusto artístico y de una ejecución, que dan a
las claras el gusto del arte que en el señor Cavalli tienen un gran cultor.
Está edificada en la parte más alta de la ciudad, en una hermosa posición, la que está destinada a un gran porvenir,
pues es la parte de Santiago que más rápidamente ha iniciado su paso de progreso en lo que se refiere a adelanto
edilicio.
El señor Cavalli es natural de la ciudad de Piacenza y llegó a Chile el año 1914.
FABRICA DE CAJAS DE CARTÓN DEL SEÑOR LUIS CAVALLI
Pío Nono N° 55. Teléfono Inglés 647. Casilla 3528, Santiago.
En el ramo de la fabricación de envases y artículos de cartón, la casa que posee el señor Luis Cavalli en esta ciudad
es, sin duda, una de las más progresistas y cuyos negocios tienen la más extensa amplitud. Algunas de las materias
primas que se emplean en esta fábrica son importadas, como los cromos, papeles de fantasía, corrientes, etc., que
vienen de Bélgica, Alemania, Holanda y Norte América. De Alemania y de Inglaterra se importan, también, los alambres
que se usan para coser las cajas. En cuanto es posible, el señor Cavalli da preferencia a la materia tarima
nacional.
La venta de los artículos fabricados en este establecimiento se efectúa por mayor y por menor. Se produce toda clase
de tipos de cajas para usos comerciales, por ejemplo: cajas para calzado, para sombreros de señoras y de hombres, para
camisas, cuellos, calcetines, medias, etc. El artículo de fantasía es la especialidad de la Fábrica. Produce elegantes
cajas para confites, bombones, estuches, etc., de calidad y presentación tan excelente como la extranjera. Las ventas
se hacen en todo el país, especial mente en Valparaíso y en Santiago. Las excelentes condiciones de productividad en
que se encuentra la fábrica, permiten elaborar artículos para la exportación.
El personal ocupado en sus labores es numeroso, pues sólo las operarías llegan a 60, aparte de los chauffeurs,
carpinteros y mozos.
La Fábrica es dirigida personalmente por el señor Cavalli, que es secundado eficaz mente por el señor Bruno Varoli,
su empleado de confianza, y también por el señor José Zentilli, además de un experto contador.
El edificio ocupado por el establecimiento está dividido en dos cuerpos: uno la Fábrica propiamente dicha, y el otro
la casa particular. A la entrada del local hay un amplio y extenso pasadizo que sirve para la entrada y salida de los
carruajes. En sus partes laterales se encuentran instaladas las oficinas.
La Fábrica fue fundada por el mismo señor Cavalli el 19 de Abril de 1918, en la comuna de Providencia. A los dos años
después (Mayo de 1920), se trasladó a su actual edificio propio de dos pisos, el cual tiene una superficie de 1.600
metros cuadrados con extensas bodegas subterráneas.
Se divide en los siguientes departamentos: de maquinaria, que cuenta con máquinas modernas para todos los trabajos; de
forrado y terminación de los artículos; de empaquetadura para la expedición; taller de carpintería para los estuches
y cajas de madera, dotado de todos los útiles necesarios; de artículo fino: bomboneras y productos de fantasía. En el
segundo piso está el departamento para las cajas grandes, y en el subterráneo las bodegas, en donde se almacenan las
cajas y papeles. Hay, además, una bodega en los altos y otra en el primer piso.
La firma gira con un capital de 550 mil pesos.
El espíritu progresista de este activo industrial no ha parado aquí. Últimamente instaló también otra fábrica de lozas,
mayólicas, azulejos y cerámica en general, añadiéndole todas las industrias correspondientes a este ramo. Para este
nuevo giro se asoció con el señor ingeniero don Rafael Pascual Prat, que es el técnico en este ramo, quien tuvo antes
una gran fábrica en Barcelona de la misma clase.
El señor Luis Cavalli nació el 19 de Abril de 1882, en la ciudad de Piacenzia, ubicada en las cercanías de Milán y
edificada a las márgenes del río Po. Llegó a Chile en Mayo de 1914, habiendo permanecido antes cinco años, en el Brasil.
Conoce toda Sud América, incluso el Amazona -y las Guayarías. En Europa ha recorrido Francia, Suiza, Portugal y conoce
todos los pueblos y parajes de Italia, su patria.
Su vocación fue siempre por las industrias, y es profesional en el ramo de cartonaje. En un tiempo fue también
comerciante. Es casado con la señora Rafaela Berti y tiene dos hijos que son chilenos.
Es miembro de numerosas instituciones, entre ellas de la Cámara de Comercio Italiana, con sede en Valparaíso, de la
Sociedad de Fomento Fabril
, a la cual ingresó poco después de fundar su establecimiento, de la Cámara
Industrial, etc.
El señor Cavalli contribuye, con su trabajo y su preparación, al progreso general de la industria racional