A mediados del siglo XIX, el gobierno de Manuel Bulnes, a instancias de Claudio Gay, determina contratar los servicios del ingeniero
agrónomo lombardo Luis Sada de Carlo, con el propósito que dirija la Escuela Práctica Agrícola y administre la Quinta Normal de
Agricultura de Santiago.(1)
Este profesional llega a Chile en 1849 y, de inmediato, asume el rol de director de la escuela y administrador de la quinta.
Desde estos cargos, participa de la introducción de algunas especies frutales, junto con alrededor de 80 variedades de vid que planta
en los terrenos de la quinta.
Además, contribuye con la difusión y conocimiento del cultivo de la morera y con de la enseñanza
de la apicultura, permitiendo la producción de miel y cera en nuestro territorio. De la misma forma, aporta con la divulgación de los
conocimientos necesarios para el cultivo del gusano de seda. Corresponde a su iniciativa el primigenio esfuerzo por volver comercial
esta actividad y, para ello, crea una sociedad con los empresarios locales Francisco y Alejandro Silva. Por otra parte, se distingue
por su espíritu filantrópico. Así, pues, dona un vasto terreno a la Sociedad de Instrucción Primaria, para fundar la primera escuela
agrícola de Santiago que, algunos años más tarde, lleva el nombre de Escuela Italia.
En Perú, durante el mandato de San
Román, hacia 1862, se concreta la iniciativa de fundar una escuela de agricultura,
optándose por contratar a Sada de Carlo. Pero,
algunas dificultades postergan su apertura hasta 1869, cuando el Estado adquiere la hacienda Santa Beatriz. Permanece como director
hasta 1874, fecha en que es reemplazado. Con el estallido de la guerra con Chile, en 1879, este centro de enseñanza cierra
definitivamente sus puertas.
La Ilustración,1921, pág. 67. De igual modo, encontramos información relevante respecto de Luis Sada de Carlo, en las siguientes direcciones:
Origen y desarrollo de la Colonia Italiana en Santiago, 1850-1918