Un ejemplo de la laboriosidad de los hijos de Italia en esta República, lo da el señor Enea Ravanello, un verdadero artífice de
forjado en metales, siendo unos de los primeros que en este país, ha sabido dar la importancia que tienen estas artes y al mismo
tiempo poner a la Nación fuera de la tutela del extranjero en lo que se refiere a las obras decorativas en metales.
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Desde el año 1912 el señor Ravanello tiene instalado en esta capital en la calle Seminario Nº 681, teléfono 154 Santa Elena un gran
Taller de Arte Decorativo, Herrería y Ferretería Artística en la cual se ejecutan toda clase de trabajos, los que luego pasan a ocupar
el lugar de honor que merecen en los principales edificios que día a día se construyen y hermosean esta capital.
Trabajos como las puertas y ventanas del Banco Anglo Sud-Americano, puertas monumentales de la Biblioteca Nacional, Diario
Ilustrado
, Bolsa de Comercio, Palacio Arzobispal, Banco Nacional, Banco de Chile (Santiago), Banco Edwards (Valparaíso), y
edificios de los señores Luis Undurraga, Raúl Edwards, Francisco Ossa (Palacio Arzobispal) y otros que se nos escapan, son dignos de
especial mención y los editores de esta obra complacidos lo hacen, pues es una verdadera afirmación de lo que puede el carácter
itálico, la capacidad artística de sus hijos y la tesonera cualidad productora de los que al migrar son un timbre de orgullo para la
patria lejana.
El pequeño taller que un día principiara a funcionar en la calle de Jofré Nº 28, es hoy día uno de los más importantes de esta capital,
bajo la direcci6n artística del señor Ravanello, que es un verdadero creador y orfebre del hierro; tiene 70 operarios, los cuales siguen
las huellas del maestro y serán los futuros artistas nativos que independizarán al país de toda tutela extranjera en el arte decorativo
de los metales.
En la visita que hicimos al gran taller que tiene instalado, con todas las maquinarias y comodidades modernas en la calle Seminario,
pudimos apreciar y contemplar trabajos artísticos de forjado a mano que acreditan en cualquier parte del mundo el artista que los
ejecuta.
Referencias bancarias: Banco Italiano y todos los Bancos de Santiago.
El señor Enea Ravanello llegó al país el año 1911, siendo natural de la bella e industriosa ciudad de Milano